Todo comenzó después de que la nieta de Susana Giménez celebrara con sus amigos la noche de año nuevo en el boliche Tequila de Punta del Este. Una mujer de nombre Gimena, que alquiló junto a su familia una casa justo frente al boliche, cerca de las tres de la mañana quiso sacar el auto para ir a buscar a su hijo de 17 años a una fiesta. Pero se encontró con varios vehículos estacionados en doble fila, lo que le impedía la salida. A pesar de que el espacio para pasar era muy pequeño, intentó maniobrar para pasar sin tocar ningún auto. Ahí apareció Lucía Celasco, a los gritos.  "No me toques el auto porque te mato", disparó la joven, enardecida ante la posibilidad de que le rozaran siquiera su Mini Cooper. Ahí salió de la casa el marido de la mujer y le habría dicho a la nieta de Susana: "¿Por qué no te calmás, qué te pasa?, ¿estás borracha?, ¿por qué no estacionás bien tu auto así podemos salir". La respuesta de Lucía solo agravó las cosas. Lo insultó y le dio una cachetada. El hombre, que habría sufrido un ligero corte como producto de la agresión, le avisó:  "Ahora te voy a hacer la denuncia a la comisaría".  Lucía se puso más furiosa aún, y en medio de una catarata de insultos, habría dicho: "A mi nadie me hace una denuncia. ¿Vos sabés quien soy yo?"  En pleno escándalo, apareció Mercedes Sarrabayrouse, la mamá de Lucía, acompañado por su pareja, Joe Miranda. Asustada, la familia decidió meterse en su casa, ya con su hijo, que como los padres no lo habían ido a buscar, se volvió solo.Testigos del hecho, aseguran que la hija de Susana habría empezado a tirar piedras contra la vivienda mientras los habrían amenazado con que si hacían la denuncia, "les vamos a romper todo."   Finalmente la pareja argentina radicó la denuncia, por la agresión, y también por los daños a la vivienda, ya que es alquilada. De parte de la familia Celasco todavía nadie hizo declaraciones. Al parecer, habría videos y audios que ayudarían a echar luz sobre el escándalo.